La tuna, ícono vigente de los estudiantes universitarios
La historia y tradición de la tuna universitaria se remonta a varios siglos atrás, teniendo sus orígenes en la España medieval.

La tuna era un grupo de estudiantes universitarios que se unían para formar una especie de hermandad musical itinerante. Su propósito principal era recorrer las calles de las ciudades universitarias, alegrando el ambiente con su música y ganándose el sustento a través de sus interpretaciones. Aunque no hay ningún documento escrito, diversas fuentes opinan que la palabra "tuna" tiene su origen en el término latino "tonus", que significa "sonido" o "melodía". Durante los siglos XV y XVI, las tunas se formaron en las universidades españolas como una forma de reunir a los estudiantes interesados en la música, la poesía y la bohemia. Estos jóvenes estudiantes, vestidos con trajes característicos inspirados en los estudiantes de la época medieval, están provistos de capa y guitarra, viajaban de ciudad en ciudad, compartiendo su talento y picaresca con el público.
A medida que pasaba el tiempo, la tuna universitaria se convirtió en una institución arraigada en la tradición estudiantil. Los integrantes de la tuna usualmente ser estudiantes de diferentes carreras, y sus actividades se centran en la música, el canto y la interpretación de instrumentos tradicionales como la guitarra, el laúd y la bandurria. Además de su labor musical, las tunas también participaban en eventos académicos, festivales y competiciones entre diferentes agrupaciones.
La tradición de la tuna se extendió por toda Europa y América Latina a lo largo de los siglos, adaptándose a las costumbres y culturas de cada región. En la actualidad, sería absurdo creer que esta esta tradición siga siendo purista en su práctica ya que con el solo hecho de haber migrado a otros países, fuera de su cuna española, se puede afirmar que está ya sufrió muchos cambios en su praxis. Sin embargo, las tunas universitarias continúan existiendo e incrementándose en número, pues casi no hay universidad que no cuente con una tuna en su haber.
Además de su contribución musical, la tuna se ha convertido en un símbolo de camaradería, amistad y tradición estudiantil. Los miembros de la tuna forman lazos estrechos y duraderos, compartiendo experiencias, anécdotas y vivencias durante su participación en el grupo. Muchos tunos consideran su paso por la tuna como una etapa fundamental en su vida universitaria, una experiencia enriquecedora que va más allá de la música y que deja huellas imborrables en su formación personal.
La imagen de la tuna, con sus trajes vistosos y su actitud alegre y desenfadada, se ha convertido en un ícono reconocible en las ciudades universitarias de todo el mundo. Los ciudadanos y turistas disfrutan de sus serenatas, canciones y espectáculos callejeros, que evocan la alegría y la nostalgia de tiempos pasados.
Los colores de las becas y tunas universitarias pueden variar según la institución y el país. Sin embargo, podríamos compartir con ustedes algunos colores tradicionalmente asociados con estas actividades:
Colores de becas
Rojo: Derecho

Azul: Ciencias

Amarillo: Medicina

Naranja: Contabilidad y Administración

Morado: Tunas Universitarias

Dentro de sus principales accesorios tenemos
Capa: La capa de la tuna es una prenda característica y puede variar en tamaño y diseño según la universidad. Algunos colores comunes son el negro, el azul marino, el verde y el granate.
Bicornio: Sombrero utilizado por los tunos generalmente es de color negro, aunque puede haber variaciones según la tradición de la universidad.
Beca: Distintivo principal del traje de tuno, íntegramente relacionado con los colores de la universidad o facultad a la que pertenecen.
Sin duda la tuna es un legado universitario que se ha ido cultivando de distintas maneras y perspectivas, sin embargo, su esencia principal aun permanece.
